GALWAY
Un paseo : Esta apacible ciudad portuaria y costera se transforma en verano, sobre todo cuando llegan las carreras y el Ladies Day , una especie de carnaval vestimentario y etílico. Cuando las calles están despejadas, el viajero tiene una caminata placentera por el centro, aunque también puede recorrer el paseo marítimo bien provisto de su impermeable y sus gafas de sol por si tiene un cambio de estación cada dos horas. Un restaurante : Con una oferta muy amplia, como corresponde a las ciudades balnearias, Galway City tiene la virtud de satisfacer el apetito de todos, ya sea goloso como en el Sheridans Cheesemongers , con sus vinos, quesos y charcutería, curioso, como en el hispano-irlandés Cava Bodega , con sus pinchos de autor, o tradicional como en The Dáil , donde la Chawder es un cuenco de salud para el viajero. Además, estos dos últimos tienen WiFi... Una visita : Algunos se atreven a entrar en el Museo del Claddagh , una joya algo sobrevalorada, pero el viajero pref